El sábado 11 de octubre celebramos la segunda quedada, tras varias intentonas fallidas en el caótico mes de septiembre. Lo primero que hay que reseñar, desde luego, es que tenemos una nueva «miembra» (que diría «la Bibi») sagrapop, ¡Bienvenida oficialmente! Sagrapop trajo una lengua de nata de su pueblo, que no pudimos probar para que no nos echaran de la pastelería en la que estábamos, pero que nos regaló. Y aunque como dice el título de la entrada, vamos creciendo, sólo pudimos acudir tres a la cita: sagrapop, azaharania y yo, Inda.
En cuanto a tejer se refiere, tampoco sacamos las agujas esta vez, ¡pero esto hay que remediarlo para la próxima! Por una parte, porque no paramos de charlar y charlar, que no sólo de tejer vive la mujer… y por otro lado, porque aún no hemos encontrado un sitio agradable y cómodo para tejer, no en todas las sillas de las cafeterías es fácil manejar las dos agujas, al menos para mi. Así que desde aquí comunico a las tejedoras del grupo:
¡Abrid bien los ojos cuando os mováis por la ciudad, porque puede estar en cualquier parte… desplegad antenas y estad atentas, al girar esa esquina puede estar el lugar de reunión de nuestros sueños!
Kaitana y yo, que haremos mañana una miniquedada crochetera, comenzaremos la cruzada, ¡deseadnos suerte!
Podemos ir poniendo ideas en los comentarios (hay que darle vidilla a los comentarios eh) sobre los sitios que se nos vayan ocurriendo a todas.
Pd: intentad que en el lugar que se os ocurra se nos permita a los fumadores dar rienda suelta a nuestro vicio, a no ser que os moleste mucho el humo, porque quizás prefiráis que en el local no se permita fumar, en ese caso, decidlo sin problema, porque entiendo que es molesto.
Lo siento, me he despistado un poco, vuelvo a la crónica: aunque no tejimos, gran parte de nuestra charla giró en torno al punto, como no podía ser de otra forma. Azaharania me ayudó a comprender cómo y para qué sirven los montajes provisionales a crochet a la hora de hacer un chal, y nos comentó que le echáramos una ojeada a la canción de las Mason-Dixon que ya se ha enlazado en este blog (no podía esperar, ¡me encantó!). Y yo, Inda, llevé un libro nuevo que compré en un viaje a Portugal que hice hace poquito, no es un gran libro, pero estaba muy baratito y tiene algunas cosas aprovechables. Además llevé una madeja de una lana de Luisa Harding que no sé qué hacer con ella, aunque me encanta, y entre sagrapop y azaharania me dieron algunas ideas. A sagrapop le estuvimos reseñando un par de tiendas en Sevilla donde gastarse los cuartos, pero esto lo dejamos para la nueva página del blog sobre tiendas.
Inda.